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albania
Somos un grupo deseoso de compartir lo
que Dios ha hecho en nuestras vidas con los albaneses.
¡Síguenos en esta aventura!
que Dios ha hecho en nuestras vidas con los albaneses.
¡Síguenos en esta aventura!
"De hecho, aunque el cuerpo es uno sólo, tiene muchos miembros, y todos los miembros, no obstante ser muchos, forman un sólo cuerpo."
1 Corintios 12:12 El viaje misionero de este año ha llegado a su fin y es hora de volver a casa. Nos llevamos una maleta llena de recuerdos y acciones de gracias por lo que hemos podido hacer en Albania. El Señor ha sido fiel y nos ha protegido en todo momento. Albania es un país de muchos contrastes, y apenas hemos rozado la superficie de su vida y cultura. Sin embargo, ha sido una oportunidad increíble y volvemos a España con ganas de compartir lo que Dios está haciendo aquí. Los últimos días han pasado volando. El viernes en la mañana nos despedimos del grupo de estudiantes universitarios con una clase de refranes y expresiones en español, que supuso un reto hasta para los más avanzados. Además, al venir cada uno de nosotros de regiones distintas de España, pudimos abarcar aún más expresiones diferentes. Al terminar, nos fuimos a tomar un café con todos y les enseñamos a jugar con la baraja española. Fue un tiempo muy alegre y disfrutamos de la compañía de ellas. Lo mejor de todo fue que mostraron agradecimiento y deseo de seguir participando en otras actividades organizadas por Giovanni para practicar español. Todos dejaron sus datos y esperamos que ello pueda ser el comienzo de una nueva obra allí. Orad por estas estudiantes, que el Señor toque sus corazones, que se animen a seguir participando en más actividades y que puedan llegar a conocer al Señor. Por la tarde, realizamos la última velada española con un grupo de la iglesia. Giovanni invitó a los hermanos y a algunos amigos no creyentes y compartimos con ellos a través de canciones, testimonio y comida española. Fueron retados a seguir adelante y fue una gran oportunidad de animar a los hermanos y compartir con ellos una vez más. Al final de la actividad pudimos hablar con varios de ellos y todos se mostraron agradecidos e incluso intentaron practicar algo de español. Creemos que este tipo de actividades pueden ser una herramienta para atraer a amigos y conocidos a algo diferente y que a su vez fomenta el compañerismo y relaciones más duraderas. Orad por los hermanos de la iglesia, que Dios guíe su obra en Tirana y que muchos más puedan llegar a conocerle a través de ellos. Hemos venido al viaje personas muy diferentes, de trasfondos distintos, pero unidos bajo un mismo propósito: compartir del amor de Dios con el pueblo de Albania. El Señor nos ha usado a cada uno, con nuestros defectos y virtudes, para llevar a cabo una obra específica. Doy gracias a Dios por el privilegio de haber servido junto a creyentes que aman a Dios y desean compartir de él a otros. No nos vamos como hemos venido, sino que hemos aprendido mucho y sobre todo, nos llevamos la carga de oración y apoyo a la obra aquí. Gracias a todos por leer este blog, también podéis ser parte de esta aventura si os unís en oración y pedís a Dios por un cambio en la vida de los albaneses. ¡Que el Señor os bendiga! ¡¡Mirupafshim!! (¡¡Adiós!!) Dani Pascual
1 Comentario
"Delante de ti he dejado abierta una puerta que nadie puede cerrar. Ya sé que tus fuerzas son pocas, pero has obedecido mi palabra y no has renegado de mi nombre."
Apocalipsis 3:8 Esta semana nuestro enfoque ministerial han sido las clases de español con los estudiantes de la Universidad de Tirana. Ha sido una experiencia increíble el poder compartir con estos chicos e intentar enseñarles de la mejor forma posible. Todos tenían distintos motivos por el que aprender o practicar español, pero nos sorprendió gratamente su buena actitud y disposición a aprender, además de su deseo de practicar más incluso estando ellos ocupados. Hemos comenzado las clases algo más tarde para darles margen de llegar a tiempo y usamos ese tiempo de espera para conversar con ellos y conocerles mejor. Algunos de ellos viven lejos, otros trabajan durante el verano o tienen diferentes compromisos familiares, pero todos intentaban llegar a tiempo para aprovechar al máximo. Arrancamos la clase con un juego en el que practican y aprenden vocabulario nuevo para luego pasar al estudio de gramática española. Nos enfocamos en subir el nivel y estamos estudiando el modo subjuntivo y la formación de palabras. Después, nos dividimos en grupos para poner en práctica lo aprendido a través de actividades que dan pie a la conversación. A mitad de las clases hacemos la pausa del café y aprovechamos para charlar y aprender más de ellos y su cultura. Las clases han sido un reto personal para todos los "profesores", pues hemos tenido que preparar nuevos materiales sobre la marcha y pensar actividades que se adecuasen a su nivel. Pero ha valido la pena al ver las ganas e interés que ponían en cada actividad. Muchas gracias a los que nos habéis ayudado desde España a preparar el material e ideas para trabajar con ellos. El miércoles por la tarde, quedamos con la estudiante con más nivel de español para dar un paseo por la ciudad juntos. Kristjana fue la que siempre mostró más interés por asistir a estas clases y su entusiasmo por la lengua de Cervantes es impresionante. Quedamos con ella por la tarde en la plaza de Skanderberg y fue una guía turística estupenda. ¡Que mejor que una albanesa para enseñarte Albania! Conversamos mucho con ella, no sólo de los estudios, los planes de futuro y la vida en Albania, sino también de la fe. Lo que más nos llamó la atención fue que ella pensaba que Giovanni y todos nosotros éramos católicos como ella, por ser personas "buenas" que veníamos a ayudar a las personas con necesidad. Giovanni nos explicó después que esto refleja el gran desconocimiento por parte de la sociedad albanesa de otros tipos de fe distintos al suyo y cómo aún queda mucho por hacer para dar a conocer aquí la obra del pueblo evangélico. Tuvimos una velada fantástica y creo que la vamos a echar mucho de menos cuando volvamos a España. Orad por Kristjana, para que como su nombre lo dice, pueda venir a Cristo y entender que la fe es mucho más que hacer buenas obras. El jueves cambiamos la velada española por la "mañana española", para que fuese más fácil para los estudiantes quedarse después de la clase a conocer algo más de la cultura española. Idaira de vistió con el traje típico de Canarias y nos enseñó algunos pasos del baile del Vivo, lo cual fue muy divertido. También compartimos el típico gazpacho y tortilla de patatas y algo de turrón de almendras. Aprovechamos la oportunidad para que conociesen a la familia de Giovanni y así puedan continuar con la relación cuando nosotros volvamos a España. Los albaneses aman la música y las canciones y estuvimos mucho tiempo cantando y compartiendo juntos, tanto que no querían irse. Creo firmemente que el Señor tiene un plan para la vida de estas personas, y que esa puerta "entreabierta" que sólo atisbamos a ver ahora, se abrirá por completo en Su tiempo. Oremos para que el Señor use estas actividades de español para abrir una oportunidad en la Universidad y poder testificar de Él a muchos otros jóvenes albaneses. Que el Señor toque el corazón de estos chicos y que ellos puedan experimentar la gracia salvadora de Dios en sus vidas. Dani Pascual "Porque yo sé muy bien los planes que tengo para vosotros —afirma el Señor—, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de daros un futuro y una esperanza. Entonces me invocaréis, y vendréis a suplicarme, y yo os escucharé." Jeremías 29:11-12 El lunes a las 9.30 de la mañana, nos encontrábamos de pie frente al Oxhak, una gran chimenea industrial, que era el punto de reunión donde nos íbamos a encontrar con los estudiantes para las actividades de español preparadas para comenzar ese día. Pero pasó media hora y aún no habían llegado. "Parece que están tardando un poco, ¿es normal para los albaneses llegar tarde a actividades como ésta?", preguntamos. "Depende de la ocasión, pero es raro que aún no hayan avisado." nos contestó Giovanni, el obrero a quién venimos a servir y que tiene 15 años de experiencia viviendo en esta cultura. Fuimos a buscarles por los alrededores, para ver si estaban esperando en otro sitio, pero no vimos a nadie. Finalmente nos resignamos a que ellos no iban a venir. Sinceramente, en ese momento me sentí algo triste y decepcionado al ver que ellos no habían llegado, sobre todo tras haber preparado las actividades para ellos. Sin embargo en lugar de desanimarnos, decidimos como grupo orar pidiendo la dirección del Señor sobre qué hacer en esta situación. Giovanni empezó a buscar en los armarios del local de la iglesia y sacó una caja con folletos en albanés. "Nunca he hecho este tipo de actividad en esta zona, pero podemos ir a un parque cercano, tocar algo de música, repartir estos folletos y tener conversaciones con quién esté allí." Puede parecer algo alarmante en un país mayoritariamente musulmán, pero todo lo que nos encontramos allí fueron miradas curiosas y personas mayores jugando tranquilamente al ajedrez. Mientras cantábamos canciones cristianas, Giovanni y los demás estuvieron conversando con varios de ellos. Nos llamó la atención uno de estos hombres, que leyó el folleto al recibirlo, lo volvió a leer mientras conversábamos con otros, y se lo guardó con cuidado en el bolsillo. A veces no sabemos por qué el Señor permite que ocurran ciertas cosas, pero podemos estar seguros de que Él tiene un propósito para nuestrs vidas y ministerio aquí. Sabemos que Él puede usar un folleto, una conversación, hasta una canción en un idioma distinto al suyo, para atraer a alguien a la salvación. Oremos por esas personas en el parque, que el Señor toque sus corazones y puedan llegar a conocerle de una forma personal. El lunes por la tarde, Idaira compartió con un grupo de mujeres (en su mayoría no creyentes) que Migena, la esposa de Giovanni, dirige. Ellas llevan varios años reuniéndose y muchas de ellas ya han escuchado del Señor. Idaira tuvo la oportunidad de dar su testimonio, entablar relaciones con ellas y hasta pudo conversar en español con una chica del grupo e invitarla a las clases de español. Orad por ellas, especialmente por Migena, que el Señor la use para poder seguir compartiendo Su Palabra entre ellas y que pronto puedan recibir el mensaje de salvación y vida eterna. El martes vino la lluvia. Y con ella, dos estudiantes esperándonos frente al Oxhak. Más tarde llegaron las demás, y teníamos cinco estudiantes listas para practicar español. ¡El Señor contesta las oraciones de su pueblo! Todas tenían motivos diferentes para practicar español, pero mostraron una gran actitud y disposición para aprender. La idea del primer día era hacer una toma de contacto con los estudiantes y ver cómo podíamos servirles y enfocar las clases. Pronto nos dimos cuenta del alto nivel que poseían todas y ello nos ha hecho replantearnos todas las actividades para que se ajusten a sus necesidades. Orad por estas clases, para que estas chicas y otros estudiantes puedan venir, aprender español, pero sobre todo, que podamos establecer relaciones personales y de amistad, para que también podamos compartir con ellos las buenas nuevas del evangelio. Es increíble ver cómo Dios trabaja en este país. Hace 30 años era impensable hacer actividades de este tipo y poder compartir del Señor en la calle, y sin embargo, aún hay muchas barreras y rechazo al evangelio. La historia de este país está plagada de dolor y opresión contra el pueblo, pero sabemos que nuestro Dios ama a los abaneses y Él quiere que ellos puedan conocerle. Oremos para que las barreras y prejuicios que impiden la propagación del evangelio se rompan, y las personas aquí puedan entregar su vida a Él. Dani Pascual Y Jesús recorría todos los pueblos y aldeas, enseñando en las sinagogas, anunciando las buenas nuevas del reino...
Mateo 9:35 Este fin de semana hemos visitado dos localidades para llevar a cabo reuniones en las que compartir con todo tipo de personas. Han sido un par de días agotadores, pero nos han servido de experiencia para poder entender la realidad de la iglesia albanesa. El sábado nos levantamos temprano para viajar a Dürres, una ciudad costera a 50 kms de Tirana, a realizar la segunda "velada española" con el grupo de no videntes de esa ciudad. Mi compi de asiento era Dennis, un chico muy simpático que se dedica a ayudar a los no videntes de forma voluntaria en sus ratos libres. A pesar de la barrera del idioma, nos comunicamos bien (¡el fútbol y la música son idiomas universales!) y nos echó una mano para arreglar las mesas y sillas en el local de la iglesia donde haríamos la actividad. Estas actividades se llevan realizando desde hace pocos meses y son una oportunidad para compartir y servir a estas personas y sus familias. Ellos aquí tienen muchas dificultades en su vida diaria y aún no existen organizaciones a nivel nacional, como la ONCE en España, así que hay mucho desconocimiento de parte de la sociedad sobre cómo mejorar sus condiciones de vida. La reunión fue idéntica a la del viernes, con canciones, un testimonio y gazapacho y tortilla de colofón. Fue genial poder compartir con ellos y escuchar algunas de sus historias. Tras un breve paseo por el centro histórico de la ciudad, volvimos a Tirana para el culto de la iglesia. Fue una bendición conocer a los hermanos allí y poder también compartir con ellos e intentar cantar canciones conocidas, pero en albanés (ya no había tortilla esta vez, jeje). El domingo, de nuevo a la carretera. Esta vez pudimos comprobar más de cerca el temido tráfico albanés. Juan se animó a conducir el coche que habíamos alquilado para el día y nos dispusimos a recorrer los 100 kms que nos separan de Berat, una ciudad en el centro-sur del país, para dar un paseo por la mañana y luego visitar la iglesia en una pequeña aldea a 10 kms de allí, en Ura Vajgurore. La iglesia fue fundada por un misionero holandés tras la caída del comunismo y realizan los cultos en el pequeño apartamento comprado por él. Fue muy especial poder cantar con ellos y compartir con ese grupo de fieles en un lugar tan inóspito. Edolia, una chica que llegó por primera vez al culto, fue impactada por el testimonio compartido. Oremos para que ella pueda llegar a conocer a Dios y se una a este grupo de hermanos. Tras el culto, salimos a hablar con las personas de la aldea. Algunos respondieron de forma violenta, pero otros escucharon con más calma el mensaje. Oremos por esta pequeña localidad, hay mucha necesidad y pocos obreros para llevar a cabo el trabajo. El fin de semana estuvo lleno de experiencias inolvidables, conectando con la cultura, conociendo a las personas y haciendo el trabajo que 2000 años antes, Jesús comenzó. Orad por todas aquellas personas que han escuchado el evangelio, que algún día puedan conocee a Dios, el único que puede brindarles auténtica paz y esperanza a sus vidas. Dani Pascual Tras varias semanas de preparación, ¡por fin estamos en Albania! Nos encontramos en el aeropuerto con muchas ganas de vernos las caras (el grupo de whatsapp está bien, pero ya tocaba saludarse en persona) y de embarcarnos en esta aventura. ¿Y por qué a Albania? Dios siempre tiene un propósito en cada uno de los caminos que tomamos y esta vez usó a mi padre, que me animó mucho a venir y apoyar este ministerio. La federación de iglesias a la que pertenece nuestro punto de misión en Illescas (FIEIDE) está buscando apoyar proyectos misioneros en esta región de Europa y adoptarles como propios a largo plazo. ¡Qué bendición poder ser parte de algo tan grande! Muchas iglesias en Centroamérica y España desean que su Palabra sea predicada en estos lugares. Y ahora puedo formar parte de ello.
Nuestro viaje comenzó sin contratiempos, y logramos traer todo lo necesario sin problemas. Hasta la fruta en "contrabando" pasó desapercibida. Tras un vuelo de 4 horas y una breve escala en Estambul, nos pusimos rumbo a Albania. El país se presenta ante nosotros lleno de contrastes y aventura, como el tráfico albanés, las compras en el mercado y la barrera de comunicación, aunque siempre contamos con la ayuda del albanés de Giovanni en todo. Esta tarde tuvimos la oportunidad de compartir con un grupo de personas no videntes y sus acompañantes una "velada española", donde cantamos canciones, se dio un testimonio de la obra del Señor en la vida de uno de nosotros y se compartió tortilla de patatas y gazpacho, preparado todo por nosotros. Todo el cansancio y estrés de las horas de preparación de la comida se esfumaron al ver la buena voluntad de todos en escucharnos y su agradecimiento por lo que pudimos compartir con ellos. ¡Hasta se repitieron más tortilla! Oramos para que el Señor pueda seguir obrando en las vidas de ellos y que algún día esa oscuridad pueda transformarse en luz. Que aunque no puedan ver su creación, el mundo que nos rodea, puedan llegar a verlo a Él, nuestro Señor Jesús, en quién hay salvación y vida eterna. Dani Pascual |
Dani PascualProfesor y estudiante. Junto a un equipo de España servimos a la familia Nájera y a su iglesia en Albania. ArchivosCategorías |